Poner por escrito lo que sentimos y pensamos constituye una magnífica forma de reflexión y liberación que permite tener más confianza en uno mismo.
Si usted todavía no se ha animado a escribir uno, aquí le compartiremos algunas ventajas para hacerlo.
- Permite desahogarnos de una manera sana y sin temor “al qué dirán”. Al escribir los momentos difíciles, los liberamos y nuestra autoestima crece.
- Ordena los pensamientos, y al hacerlo ayuda a solucionar confusiones y a reflexionar sobre lo que nos produce ansiedad o angustia.
- Documentar lo que nos ha pasado permite pensar qué nos ha salido bien y qué no. Es como una especie de guía para enmendar errores o potenciar lo positivo.
- Atesora los recuerdos. Al escribir los detalles y las fechas, hacemos una especie de “máquina del tiempo”, a donde se puede acudir cada vez que deseemos recordar algo especial.
- Aumenta la creatividad. El hecho de dejar fluir los pensamientos y emociones sin ninguna crítica ayuda a escribir con libertad, usando la imaginación. Es recomendable, de ser posible, agregar a su diario, por ejemplo: un recorte, una foto o un dibujo.
- Se puede mirar la vida desde otra perspectiva. Por ejemplo, si acostumbra agradecer por lo que tiene, podrá darse cuenta de las cosas valiosas que posee en la vida, y que no todo es negativo.
- Nos conocemos mejor y descubrimos partes de nuestra personalidad de las cuales no estábamos conscientes para ayudarnos a mejorar.
- Ayuda a sanar situaciones angustiantes, porque al desahogarnos se expresa lo que realmente sentimos y tememos. Digamos que es como una “válvula de escape”.
El mejor momento para comenzar a escribir un diario es ahora; no espere a encontrar la “ocasión perfecta”. Estamos seguros de que hallará aún más beneficios de los que hemos comentado. Nada cuesta intentarlo. ¡Buena suerte!